Expertos en el Tratamiento de Complicaciones de Implantes Dentales

La colocación de implantes dentales es actualmente considerada como una técnica de elección para una rehabilitación dental integral y permanente. Sin embargo, como todo procedimiento quirúrgico no está exenta de complicaciones.
Para considerar un fracaso implantológico dental se deben tener en cuenta parámetros clínicos y radiológicos; es claro que un implante dental se considera fracasado cuando no cumple el objetivo por el cual fue colocado.

Existen Varios factores que pueden afectar la supervivencia de un implante dental: factores sistémicos y psicosociales de los pacientes, errores perioperativos, factores quirúrgicos, factores prostodónticos, hábitos del paciente, y diseño del implante.
Aún hoy en día surgen algunas situaciones no deseadas o imprevistas tanto en la fase quirúrgica como en la etapa restauradora o de rehabilitación del implante, además de que a estas situaciones se suma la problemática del simple hecho paso del tiempo.

Por lo regular se habla de “fracaso”, “factores de riesgo”, “complicación”, etc.
Así, es complejo sistematizar las diferentes situaciones que pueden llevar a resultados no satisfactorios en la implantología dental.

Hablar de “factores de riesgo” y de “complicaciones”, debemos entender que son dos cosas muy diferentes, pero se debe tener muy claro que la ignorancia de los factores de riesgo devendrá en la aparición de complicaciones.

FACTORES DE RIESGO

Pacientes irradiados:
Aún cuando no supone una contraindicación absoluta, la tasa de éxito será algo inferior que si el paciente no recibiera radioterapia. Deberán tenerse presente una serie de parámetros.

Bifosfonatos: Producen un efecto ANTIRESORTIVO, esto quiere decir que inhiben la activación o reclutamiento de los OSTEOCLASTOS que son células hematológicas que degradan, absorben y remodelan los huesos, aún cuando estas células son las encargadas de de eliminar hueso de mala calidad o hueso que ha perdido su resistencia, el hecho de ser alterada esta célula ocasiona que no interactuen de forma adecuada con otros elementos o células relacionas a la correcta preservación de nuestros huesos.

Diabéticos:
Los criterios actuales no excluyen a pacientes de casos en que la diabetes está controlada, el paciente puede responder favorablemente como cualquier otro paciente, con buenos resultados y sin complicaciones.
No obstante, en los pacientes diabéticos es conveniente y aconsejable que el protocolo de evaluación previo al tratamiento con implantes dentales y de control posterior sea más preciso y exhaustivo.

Cardiópatas:
En pacientes con cardiopatías debe realizarse una detallada historia clínica, determinando fechas de episodios de isquemia de miocardio.

Anti coagulados:
En pacientes con alteraciones de la hemostasia el tratamiento dental que reciban debe ser decidido, pautado y controlado por su clínico de cabecera (hematólogo o internista) y estar en comunicación estrecha con el.

Fumadores:
Fumar, como todos sabemos es nocivo en todos los aspectos, por lo que es de esperar que fumar con implantes dentales también lo sea sobre todo durante el proceso de osteointegración, aumentando el riesgo de fracaso del tratamiento de implantes dentales.

Tipos de complicaciones con implantes dentales mas comunes:

Pérdida del anclaje óseo (que no mantengan estabilidad y pierdan o no se produzca la integración).
Complicaciones relacionadas con los tejidos blandos (alteración o defectos en encías o mucosa oral).
Complicaciones Patológicas post-operatorias (según la técnica quirúrgica empleada, los compromisos sistémicos que pueda tener el paciente y su grado de colaboración para llevar a cabo las indicaciones).
Complicaciones mecánicas quirúrgicas (posicionamiento o colocación inadecuada). Complicaciones estéticas, fonéticas y funcionales protésicamente (desproporción o proyección, alteración del habla, ejercicio de masticación en desequilibrio).

Complicaciones postoperatorias de implantes dentales

A CORTO PLAZO
Infección
La mayor parte de las posibles complicaciones aparecen después de la cirugía.
Una de las más comunes es la llamada periimplantitis, que se trata de una infección bacteriana en el área donde se ha realizado el implante dental. Habitualmente, la aparición de la periimplantitis es debida a una higiene oral insuficiente tras la intervención y los síntomas son dolor, sangrado e inflamación, llegando a la posibilidad de poder ser motivo de pérdida del implante si no se trata bien y de forma inmediata.

Durante la oseointegración: movilidad del implante o aparición de úlceras y/o granulomas

Otras posibles complicaciones pueden aparecer en la fase de oseointegración, en la cual el implante dental se integra en el hueso. Una de ellas es la movilidad del implante, que normalmente es debido a una técnica quirúrgica inadecuada.
Otra es la formación de granulomas o úlceras en las zonas de sutura del colgajo.
Si la fijación de la prótesis del diente o los dientes sustituidos sobre el implante se lleva a cabo sin que haya cicatrizado la herida quirúrgica puede aparecer una sobrecarga sobre el implante dental hará que se mueve al perder la función de anclaje.

Lesiones nerviosas
Las lesiones nerviosas pueden aparecer durante los procesos de fresado, por incorrecta información del diagnóstico y/o compresión directa del nervio dental inferior durante la colocación del implante.

A MEDIO Y LARGO PLAZO
Hay pacientes con implantes dentales con más de 30 años sin problemas, lo que nos sugiere su durabilidad ya que el objetivo de su colocación es que permanezcan de forma indefinida.
Pero a medio y largo plazo también pueden aparecer complicaciones, entre ellas:

Las que afectan a las encías
Gingivitis, hiperplasia gingival, formación de fístulas o retracción de las encías (quedando a la vista la rosca de los implantes).

Complicaciones mecánicas
También pueden aparecer complicaciones mecánicas, que no son frecuentes pero pueden aparecer, como la rotura del tornillo pilar o la fractura de la prótesis dental.

CRITERIOS PARA EVITAR COMPLICACIONES DE IMPLANTES DENTALES

Cada vez más pacientes, acuden a nuestra consulta con implantes o tratamientos completos fracasados que debemos retirar.

Es fundamental seguir unos criterios básicos para conseguir predictibilidad de éxito de los implantes a largo plazo:

TIPO DE IMPLANTE DENTAL
El implante dental debe de ser de una excelente calidad, sustentado científicamente, adecuado y especifico diseño, adecuada selección según el área donde se va a colocar, evitando que la fatiga de material pueda fracturarlo con el paso del tiempo, además de evitar desajustes, fracturas, pérdida de hueso e infecciones.

NÚMERO DE IMPLANTES SUFICIENTE
Es importante colocar al paciente el número de implantes necesarios, con el fin de que no aparezca sobrecarga que con el tiempo va a resultar en una pérdida de integración ósea o en una rotura. En muchos casos con la finalidad de reducir costos y captar al paciente se sugieren planes de tratamiento desproporcionados que estarán destinados al fracaso.

REFORZAR EL HUESO
Reforzar el hueso mediante injerto, pensando en un futuro debilitamiento adicional del hueso asociados al paso del tiempo.

ESPECIALISTAS CON EXPERIENCIA
Es fundamental ponerse en manos de especialistas cualificados en Implantología Oral, o ser referido a un Cirujano Bucal u Oral y Maxilofacial en casos complejos como patologías asociadas o procedimientos alternos de alta complejidad.